Título: Más Que Una Oración
Cita Bíblica: Mateo 6:5-15
Introducción.
Nuestra lectura de hoy está inserta en el discurso de Jesús, conocido como “el Sermón del monte”. ÉL predicaba que el Reino de los Cielos se había acercado y comenzó su ministerio revelando a Israel la conducta que ellos deberían tener en relación con el Rey Celestial (principalmente en Mateo, capítulos 5 al 7).
I. LOS TRES PACTOS
Confluyen en el ministerio de Cristo, tres Pactos, con diferentes reglas de Dios para el hombre:
A) Pacto de la Ley Vigente hasta la muerte de Jesús.
B) Pacto de la Gracia fue revelado por Dios por medio de Jesucristo Hombre aquí en la tierra.
C) Pacto del Reino es un Pacto futuro, sus condiciones son más exigentes, y su justicia es más profunda que la Ley Mosaica.
II. UNA ORACION SINCERA (vs.5, 6)
No es concebible que un cristiano busque orar en público, buscando la alabanza de los que le escuchan, para ser ensalzado, y que lo que dijera en oración fuera solo para causar una buena impresión, y no lo dijera de corazón.
La oración es comunión con Dios, es la dedicación de uno mismo a Dios, eres tú frente a Dios. Una oración secreta con el Padre es absolutamente sincera. Por eso, primero debes ser un constante orador en secreto, para ser un bendecido orador en público.
III. LA ORACION DE MATEO 6: 9-13 (vs.9-15)
A) Nuestro Señor da a Israel elementos que se deberían incluir en las oraciones, para el futuro Reino.
B) La oración debe ser dirigida al Dios Padre.
C) Orar por la venida del Reino del Mesías a la tierra.
D) La ejecución de la voluntad de Dios, es una realidad en los cielos. Jesús pide colocar en oración que esto también se cumpla en la tierra.
E) Después de pedir por lo espiritual, pedir por nuestras necesidades materiales.
F) Pedir perdón a Dios, después de cumplir con la obligación de perdonar a nuestros ofensores.
G) Pedir para ser librado de tentaciones.
IV. LA ORACION EN LA DISPENSACION DE LA GRACIA
A) Pedir en el nombre de Cristo.
B) Lo enunciado en Mateo 6:9-13 aplicable a la Gracia.
C) La oración es para todos los creyentes, y será eficaz si se mantiene una real comunión con el Señor.
D) No hay moldes rígidos para la oración de los creyentes, no hay oraciones rituales.
Conclusión.
Hermanos, meditemos en lo que significa ser Hijo de Dios. No es algo menor, sino que es algo grandioso lo que Dios nos ha dado. Ningún Pacto entre el hombre y Dios que esté basado en un sistema de méritos, se iguala en perfección con la redención, justificación y transformación dados por Gracia a los creyentes en Cristo.
Mantengamos nuestra comunión con Dios. Busquemos siempre su voluntad.
No dejemos que el privilegio y nuestra herencia, que es la oración, sea malgastada o desechada en nuestra vida. Alimentemos nuestro ser interno en Cristo, a través de nuestra vida en oración.