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Cita Bíblica: 2ª Crónicas 20: 1-22
Introducción.
Este Mensaje trata de una importante e imprescindible etapa previa para toda actividad del cristiano, que es, la preparación. Sabemos que con el Señor en nosotros tenemos victoria, pero para eso debemos estar preparados.
Vimos en la primera parte que todos nos inclinamos al pecado siguiendo los deseos de la carne, la naturaleza pecaminosa con que nacemos. De este modo todos nacemos como personas naturales, sujetos solo al entendimiento humano y totalmente vulnerables de seguir siendo engañados para condenación por las estratagemas de Satanás, a no ser que aceptemos ser rescatados por Dios mismo, por la sangre de Jesucristo.
Satanás está contra Dios, ataca a los hijos de Dios, porque nosotros participamos de la naturaleza y planes divinos y entonces, a través nuestro, trata de entorpecer los Planes de Dios.
NUESTRAS ARMAS:
- TOMAR CONCIENCIA DEL PELIGRO
- LA ORACIÓN PERSONAL
- EL AYUNO
- EL CULTO EFICAZ
Conclusión.
Un ataque satánico es el esfuerzo de Satanás para tratar de separarnos de Dios y así evitar que seamos siervos de Cristo eficaces en colaborar con los Planes de Dios en la Tierra, especialmente en la Gran Comisión.
¿Por qué a veces no podemos mantenernos firmes? Porque mantenemos en nuestro corazón ciertas cosas que no son del agrado de Dios. Es necesario que estemos con antelación preparados para los ataques, porque las tentaciones vienen cuando menos las esperamos y cuando ¡vaya casualidad! estamos menos preparados. El creyente debe estar siempre preparado, en perfecta comunión con Cristo, siendo obediente a la Palabra, entregado al Espíritu de Dios y orando sin cesar.