Cita Bíblica: Juan 1:40-49
Introducción: Dos palabras unen la experiencia de Andrés y la de Felipe, “Hemos hallado.” Son dos palabras que transmiten, con emoción, el descubrimiento más grande de sus vidas: han hallado al Mesías, al Salvador, al Hijo unigénito de Dios.
La pasión más grandes que experimenta toda persona que llega a conocer a Cristo como salvador, es la de compartir, y luego llevar, a las personas que más ama, ante Cristo. Hay, al menos, tres motivaciones para ello:
a) Porque siempre queremos compartir lo bueno con aquellos que más amamos.
b) Porque siempre vamos a querer librar del sufrimiento a nuestros seres queridos.
c) Por cuanto, desde que conocimos a Cristo como nuestro Salvador y Señor, queremos agradarle y hacer Su voluntad, y sabemos que, compartir de Su Evangelio a otras personas, es parte de esa voluntad.
Quisiera, invitarles a considerar los tres puntos anteriores con más detenimiento:
I. EL EVANGELIO ES LO MEJOR QUE EXISTE
El evangelio, las buenas nuevas del Señor, nos hablan de:
A) Una vida abundante y con objetivos elevados. Jn.10:10
B) Consuelo, compañía y justicia. Mat.11:28
C) Auténtica libertad y paz. Jn.14:27
D) La medida suprema de la verdad. Jn.8:31,32
II. EL EVANGELIO ES LA ÚNICA PUERTA DE ESCAPE
El mensaje contenido en el Evangelio, considera no sólo el encuentro con cosas buenas y hermosas para hoy, y muchas mas para mañana, también, nos revela la única puerta dada al hombre para que pueda escapar del castigo eterno que merece.
III. EL SEÑOR NOS HA COMISIONADO PARA SER SUS TESTIGOS
“…id, y haced discípulos a todas las naciones,…”
Nadie mas que tú puede decir: “he hallado” “Ven y Ve.”
Conclusión: El Señor ama mucho más a los seres que yo más quiero, incluso, me ama más a mí que cualquier persona, sea padre, madre, cónyuge o amigo. No olvidemos que él dio su vida por ti, por mí y por todos los que nos rodean.
Si nos cuesta llevar el mensaje de salvación por amor, entonces hagámoslo por el amor que el Señor les tiene a las personas, o bien, hagámoslo por la obligación que nos es impuesta por el mismo Cielo.
Que este año el Señor nos ayude a ser efectivos testigos de su Obra.