Cita Bíblica: Ruth 2:10-13
Introducción.
En la meditación de la semana pasada vimos la conversión de Ruth, el gran cambio que se produjo en ella y que la llevó a tener un horizonte completamente distinto al que había tenido durante toda su vida pasada.
Quedamos con Noemí regresando a Israel, a los campos de Belén, y con ella su nuera Ruth. Fue un regreso triste, porque se había marchado, años atrás, junto a su esposo y sus dos hijos; ahora, regresaba, viuda y sin hijos, no obstante, traía con ella un gran tesoro, su joven y virtuosa nuera Ruth.
En el día de hoy, daremos un paso más en la historia de Ruth y consideraremos el proceso que definitivamente cambió su vida, la de Noemí, y la de su descendencia.
- REDENCIÓN
- LA REDENCIÓN DE RUTH
- NUESTRA REDENCIÓN
- Vendidos por causa del pecado.
- Sin pariente que pueda rescatarnos.
- Un pariente no esperado.
Conclusión.
De un redentor común, se espera que pague el precio del rescate de una persona, luego de lo cual, esa persona es libre. Nuestro Redentor, Jesucristo, no sólo pagó el precio de nuestro rescate, sino que también nos dio herencia, familia y participación del mejor linaje que se pueda considerar.
sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, …
1ª Pedro 1:18, 19a