Amados hermanos:
Sabemos que Dios es el supremo creador, sustentador y quien hace que su Obra cumpla con su propósito original. Tristemente, dentro de la basta creación, se pueden reconocer casos de rebelión por parte de algunas criaturas, lo que ha llevado a la contaminación de sectores de ella, por lo cual se nos advierte que hoy
el mundo entero está bajo el maligno.
1ª Juan 5: 19b
Es así como nos encontramos con un usurpador que constantemente ha estado conspirando con la intención de evitar que los sublimes propósitos de Dios sean llevados a buen término.
Lo visto ha significado, durante la historia, mucho dolor para el ser humano, especialmente para el «justo» o «redimido»; sin embargo, es emocionante ver que los proyectos de nuestro Dios y Señor Todopoderoso siempre han salido victoriosos mientras son sostenidos por Su brazo invencible.
En esta mañana, les invito a continuar reflexionando sobre cómo se manifiestan en el día de hoy estas oscuras maquinaciones para no descuidarnos y para que acatemos, más conscientes que nunca, la exhortación del Santo Espíritu:
ceñid los lomos de vuestro entendimiento, sed sobrios, y esperad por completo en la gracia que se os traerá cuando Jesucristo sea manifestado
1a Pedro 1: 13b
Lectura bíblica
1ª Pedro 3: 13-18.
Introducción
En la reflexión que iniciamos el domingo pasado, consideramos que es muy importante entender que los conspiradores no son solamente aquellos que se asocian para influir e intentar moldear el futuro de la humanidad; en realidad, aquellos son solo las caras visibles de poderosas organizaciones que trascienden a lo material, pues pertenecen al mundo espiritual.
Decíamos que, para el estudiante de la Biblia, resulta fácil darse cuenta de que la Creación se encuentra bajo una gran conspiración, siendo su líder Satanás, el cual, acompañado de sus legiones, trabaja incesantemente en dañar lo creado y evitar que cumpla con sus grandes propósitos. Sus métodos van desde la persecución cruenta, pasando por la infiltración y la contaminación. Para aclarar aún más el panorama, el apóstol Juan nos dice:
Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el maligno.
1ª Juan 5: 19
Consideramos también que, tanto los conspiradores no humanos como los humanos, usan sofisticadas estrategias para lograr sus objetivos; ellos son organizados y trabajadores, para lo cual revisamos lo expuesto en el Salmo 64.
Para concluir, recordamos algunos ejemplos tomados del Antiguo Testamento, destacando que el objetivo del gran Conspirador fue, durante todo ese período, procurar que el Mesías no llegara a nacer y, luego de fracasar, intentar evitar que cumpliera su sublime misión. Para ello: destruyó a personas, familias y naciones, destacándose su furia contra Israel.
Les invito a continuar avanzando con nuestro tema, exponiendo algunas de las conspiraciones relatadas en el Nuevo Testamento.
- Conspiraciones del pasado.
- En el Antiguo Testamento (domingo pasado).
- En el Nuevo Testamento.
- Con relación a los inicios de la Iglesia.
- Conspiraciones del presente.
- Persecución cruenta de los creyentes.
- Infiltración de las iglesias.
Conclusión
No somos llamados a fundar el cielo en la tierra, somos llamados a ser testigos (en griego: «mártires») del Señor y predicar un mensaje glorioso de redención y gozo. Sabemos que, cuando el Señor nos venga a buscar, nos encontrará en medio de un mundo incrédulo, repleto de conspiraciones y, por lo tanto, muy ajeno a Él y a nosotros. También sabemos que, al igual que en el pasado, nada ni nadie logrará evitar el triunfo total y perfecto del Señor Jesucristo.
Lo anterior debe ser un poderoso estímulo para velar, orar, predicar y congregarnos ansiando la comunión fraterna en Cristo.
Por tanto, no os amedrentéis por temor de ellos, ni os conturbéis, sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros;
1ª Pedro 3: 14b-15