Mes de la Biblia
Todos los años los evangélicos de habla castellana conmemoramos con gozo el día 28 de septiembre, pues fue ese día del año 1569 que salió a la luz, por primera vez, la versión completa en castellano de la Biblia, traducida directamente de los textos hebreos y griegos.
El que realizó esta gran labor fue un evangélico español exiliado en Basilea, Suiza, llamado, Casiodoro de Reina. Su obra es conocida como: «La Biblia del Oso», pues en su tapa aparecía la ilustración de un oso comiendo miel de una colmena, la cual era el distintiva propio del impresor.
Más tarde, Cipriano de Valera dedicó una parte de su tiempo durante veinte años a la tarea de revisar esta versión. En este trabajo comparó la traducción con los textos originales del hebreo y del griego, pero él mismo dice que su trabajo consistió solo en «pocas y meras alteraciones».
Sergio Oschilewski M.
Pastor I. Bíblica Las Condes
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Cita Bíblica
2ª Reyes 22: 3-11.
Introducción
Encontrar un amigo es algo de incalculable valor; encontrar un tesoro material suele cambiar la vida de una persona; pero, encontrar el Libro de los Libros, aquel que tiene las principales respuestas a las preguntas del hombre, así como la fórmula para estar en paz con Dios, es una experiencia tal, que transforma la vida como nada lo puede hacer.
En el día a día, encontramos a muchos que transitan por la vida con una Biblia bajo el brazo y, sin embargo, es paradójico que no la han encontrado aún, pues no reconocen lo que tienen; están las personas que la usan abierta, exponiendo alguna porción, creyendo que con ello protegerán la casa y la familia; están los que la mantienen en la biblioteca de su casa con lujosos empastes. Pero también están los que la colocan en su mente y corazón. De estos últimos se puede decir que la han encontrado.
Se sabe que «El Libro» ha sido hallado, porque sus palabras cautivan y cambian a la persona de modo tan notorio que no es posible ocultarlo o no darse cuenta.
En esta oportunidad, les quiero invitar a considerar la gran experiencia del rey Josías, cuando se encontró con la Palabra de Dios, la cual había estado oculta por mucho tiempo.
- El libro perdido.
- El libro encontrado (2ª Reyes 22: 3-11).
- El libro dado a conocer (2ª Reyes 23: 1-2).
- El libro llevado a la práctica (2ª Reyes 23: 3).
Conclusión
El encuentro con «La Palabra» cautivó el corazón y mente de Josías. Esta santa fascinación le llevó a tomar acciones inmediatas, como ser: dar a conocer la Palabra a los demás, limpiar el Templo y la tierra que habitaban, e intentar cumplir con la voluntad de Dios, tan claramente manifestada en las escrituras encontradas.
Y cuando el rey hubo oído las palabras del libro de la ley, rasgó sus vestidos.
2ª Reyes 22: 11
Bienaventurados los que guardan sus testimonios, Y con todo el corazón le buscan;
Salmos 119: 2