Amados Hermanos en la fe:
Es complejo ser cristiano en un tiempo en el que la búsqueda de la satisfacción personal, en todas sus formas, se ha constituido en el objetivo mayor de vida, lo cual es enseñado y practicado desde la infancia; se trata de una forma de concebir la vida, que rechaza todo lo que limite a «mis gustos» y a «mi libertad», incluyendo, obviamente a: «mi proyecto de vida». Cuán claro lo expone Pablo en 2ª Timoteo 3:1-5.
Sí, es complejo ser y practicar la vida cristiana en una sociedad así, pues una de las características muy distintivas del hijo de Dios, es su capacidad de vivir y servir sacrificialmente, más allá de la satisfacción personal. Lo anterior, lo vemos en toda la Biblia con los ejemplos de: Noé, Abraham, Moisés, Elías, Jeremías, Juan el Bautista, Esteban, Pablo, etc. El cristiano tiene una visión y un sentir tan distinto al del mundo que suele resultar difícil, para quien no está fuertemente cimentado en Cristo, mantener con gozo su postura. Un poco más adelante le invito a continuar reflexionando sobre este tema y su relación con el servicio cristiano.
El Señor avive las esperanzas de gloria en vuestros corazones.
Sergio Oschilewski M., Pastor IBLC
Oración
Cánticos a elección
Se sugiere buscar apoyo en la serie de himnos y cánticos preparados en nuestra página web.
Lectura de la Biblia
2ª Timoteo 2:1-13
Reflexión: Más allá del agrado personal
Como respuesta a la solicitud por un servicio a la congregación, un miembro respondió: «Sí, lo puedo hacer, pero, siendo honesto, no me gusta ni me dan ganas de hacerlo». La anterior, es una respuesta que, con algunas variantes, se escucha con cierta frecuencia al interior de algunas iglesias, especialmente en nuestros días. Una de sus muchas variantes es: «no me lo pida, me carga hacerlo». También existen otras formas menos directas de negarse, como: simplemente, guardar silencio o decir: «lo voy a pensar»; y no faltan aquellos que se las arreglan para nunca estar accesibles evitando con ello que no le vuelvan a solicitar ese o cualquier otro servicio, pues, ellos van a la Iglesia a disfrutar del culto y servir sólo en aquello que les «gusta hacer.»
En el tiempo de los jueces, Dios le dice a Josué hijo de Nun: «Esfuérzate y sé valiente» (Josué 1:6)
En el tiempo de los reyes, David, antes de morir le dice a Salomón: «…esfuérzate, y sé hombre.» (1ª Romanos 2:2)
En el tiempo de Jesús, él dijo: «Y el que no lleva su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo.» (Lucas 14:27)
En el tiempo de la gracia, Pablo le dice a Timoteo: «Tú, pues, hijo mío, esfuérzate en la gracia que es en Cristo Jesús.» (2ª Timoteo 2:1), luego, el Apóstol, le da varios ejemplos de lo que esto significa.
Por todas las citas bíblicas mencionadas, y por muchas otras, resulta obvio que Dios no usa gente que no esté dispuesta a esforzarse. Esforzarse comprende la idea de ir más allá de lo que: es cómodo, sencillo, gusta o es entretenido.
Sin lugar a dudas, que el ejemplo máximo lo tenemos en el Señor Jesús; ejemplo supremo de lo que es esforzarse. Él se esforzó al máximo: humanándose, viviendo como cualquier mortal, tomando forma de siervo, exponiéndose a la burla y a la tortura y finalmente, dejándose crucificar, ¿Para qué? pues, para darnos a ti, y a mí, vida eterna y herencia en los cielos.
Los cristianos no estamos para hacer lo que nos gusta, sino la voluntad de Dios. No tenemos que esperar tener las ganas para hacerlo, sino estar de ánimo pronto para actuar cuando Dios lo quiera. El soldado, el agricultor, el médico, el atleta y, en realidad, cualquier obrero, no puede darse el lujo de hacer sólo las cosas que le gustan, evitando realizar las que les “da lata”; resulta ridículo pensarlo. Con mayor razón nosotros, rescatados sacrificialmente, sin tener mérito alguno y dignificados como hijos de Dios, recibiendo tareas sublimes, no deberíamos jamás dudar en hacer lo que Dios nos pide, o lo que vemos es una necesidad en Su Obra.
Dios no usa gente cobarde; por ello, no solamente dice: «esfuérzate» sino que también: «sé valiente»; «sé hombre». Dios no usa gente que debiendo ser madura se mantiene como niño.
Aun cuando el consejo comúnmente está dirigido a varones, es evidente que también lo es para todas las damas cristianas. No olvidemos a la mujer virtuosa de Proverbios 31:10-31. De hecho, podemos encontrar muchos casos en que mujeres supieron dar ejemplo de esfuerzo, valor y madurez, sobrepasando a los varones de su tiempo.
Hermanos, la causa de Cristo desde un principio implicó trabajo y sacrificio. Hay ocasiones en las que el Señor nos pide que realicemos trabajos que nos gusta mucho realizar y en otras ocasiones, nos pide que llevemos a cabo obras que no nos motivan. Pero, si el trabajo viene del Señor, no consultemos con nuestros gustos, simplemente hagámoslas sintiéndonos muy privilegiados de tener la posibilidad de servir al Señor de Señores.
El rey David dice: «Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová,…» (Salmos 31:24a)
Sergio O. M.
Cánticos a elección
Oración
A continuación, le invito a orar por los siguientes motivos:
Adoración, Alabanza y Gratitud
Demos gracias por la libertad que aún tenemos de difundir Las Buenas Nuevas.
El gran privilegio de compartir el Evangelio con total libertad, constituye, en realidad, una gran excepción para el cristianismo. Los evangélicos del siglo XXI debemos estar muy agradecidos por la gran oportunidad que nos ha dado Dios de ser sus embajadores y de la libertad que nos ha proporcionado para comunicar, en nuestras ciudades, la Palabra de Vida, sin mayores obstáculos.
Hermanos, seamos conscientes que el tiempo para aprovechar esta franquicia es limitado, cada día se obstaculiza más y más la propagación del Evangelio, tal como lo presenta la Biblia.
Aprovechemos responsablemente el espacio que aún nos queda.
Libra a los que son llevados a la muerte; Salva a los que están en peligro de muerte.
Proverbios 24:11
Agradezcamos por el nacimiento de Josué
Como ya se ha anunciado, el día el día 29 de agosto nació Josué, damos gracias por cuanto el parto salió sin complicaciones y los Hnos. Juan y Dajana, junto a Emmanuel y Josué, ya se encuentran en su casa.
Peticiones
El retorno de las actividades en el local de la Iglesia
Aunque no sabemos cuándo podrá ser, debemos pedir que el Señor sea dirigiendo todo lo concerniente al complejo retorno a las actividades en nuestro querido centro de reuniones. Son muchas las variables en juego y queremos hacerlo bien, sin riesgo para los asistentes, y conforme a las medidas que se dicten. Sigamos esperando con paciencia, pero también en oración.
Para ser discípulos esforzados
Considerando la reflexión de hoy, pidamos al Señor su ayuda para no dejarnos atrapar por nuestros gustos y pasiones egoístas de este siglo, sino a estar dispuestos a servirle aún cuando la tarea se vea difícil y no grata.
Orando por hermanos que nos han visitado y sus ministerios
En esta ocasión les invito a orar por los siguientes hermanos con sus respectivos ministerios:
- El Hno. Santiago Escuain.
- El Hno. Evis Carballosa.
- El Hno. Cornelio Rivera.
- El Hno. Andrés Carrasco.
Por nuestros hermanos fuera de Chile.
Perseverando en nuestro plan de intercesión por las iglesias hermanas que se encuentran más allá de nuestras fronteras, hoy les invito a orar por todos aquellos hermanos en Cristo que viven y buscan la gloria de nuestro Señor desde Argentina.
Por la nación de Israel
El Salmo 122 del rey David es muy conocido por el verso 1, que dice: «Yo me alegré con los que me decían: A la casa de Jehová iremos.» Sin embargo a veces descuidamos el verso 6, del mismo Salmo, que también dice: «Pedid por la paz de Jerusalén; Sean prosperados los que te aman.» (Salmos 122:6). Si bien esta oración está dentro de un contexto muy especial, tiene una aplicación viva para el día de hoy. Hagamos nuestra, la oración de David y oremos por Israel: por la conversión al Señor Jesucristo de sus habitantes y por paz para su territorio.
Peticiones en las cuales insistir
Por salud para el cuerpo y renovado ánimo para el alma
Como motivo permanente de oración, tengamos presente a las Hnas. Icha, Luisa, Lidia e Ylda.
Nuestro País
No podemos dejar de orar por una serie de situaciones que tienen a nuestra nación sumida en graves problemas, consideremos:
- La crisis sanitaria por el coronavirus.
- La crisis laboral y económica como consecuencia del azote de la Pandemia.
- La compleja reintegración a las labores de empresas, colegios y otros.
- La delincuencia que, como bestia depredadora, se aprovecha de toda debilidad.
- El terrorismo en la Novena Región que quema propiedades y ejerce el matonaje entre la población que trabaja.
- El intento de demoler la Constitución, base de todo el sistema de derecho nacional.
- Los proyectos de ley que contrarían directamente a la voluntad de Dios.
Pidamos por misericordia, por protección, por justicia, y también, por luz para aquellos que encabezan la Nación y deben tomar decisiones y acciones.
Mis motivos personales de oración
Te agradezco, Señor, por…
Escudríñame, oh Jehová, y pruébame;
Examina mis íntimos pensamientos y mi corazón.
Salmo 26:2
Ya está disponible la cuarta entrega del curso: Gentiles, judíos e iglesia.