Estimados hermanos y consiervos en el gran ministerio de la oración:
En la reflexión del día jueves, nos hemos detenido en un tema que nos involucra a todos, el de las feroces arremetidas que está sufriendo hoy la familia. Estas embestidas que tienen por finalidad la destrucción de esta sagrada institución cuyo fundamento se encuentra en Dios, se manifiestan en la práctica, en divisiones físicas e ideológicas que destruyen la comunicación, introducen menosprecio, desautorización, desagrado y finalmente: odio, dejando una estela de demolición y amarguras.
Hemos ido colocando sobre la mesa algunos factores involucrados, como: grupos organizados que trabajan para lograr estos malévolos fines; el porfiado distanciamiento de Dios con sus nefastas consecuencias; la apatía y a veces, complicidad de algunos padres con el sistema liberal; el poder e influencia de los medios y agencias de comunicación, y la profunda infiltración que ha sufrido el sistema de educación formal.
Creo que se trata de un tema demasiado importante y que nos afecta en forma muy directa a todos los cristianos y con ello a las iglesias.
Pido al Señor que les proteja como familia y les otorgue sabiduría para vivir el día a día.
Sergio Oschilewski M.
Pastor IBLC
Reunión de Oración
Oración
Cánticos a elección
www.iglesiabiblicalascondes.cl
(Alabanzas 🠚 Himnos/Cánticos)
Lectura de la Biblia
Romanos 13:1-7
Reflexión: La familia bajo ataque
Parte V: El Legislador Supremo y sus servidores humanos.
Síntesis de lo visto:
En el Boletín anterior consideramos el uso de la educación formal actual como instrumento de disociación familiar, al entregar contenidos de carácter antibíblico y antinaturales, colocando a los niños en una posición confrontacional con sus padres, particularmente si estos son cristianos o bien, simplemente: “conservadores”.
Dijimos que esto genera tres tipos de víctimas inmediatas: a los padres, a los niños y a los profesores que no participan de las ideas liberales. Es justo agregar que la situación resulta también muy difícil para directores y en general, para todo el personal cristiano o conservador, que trabaja en los recintos educacionales.
Veamos ahora, otro de los factores que influyen destructivamente en las relaciones familiares, desestabilizándolas y promoviendo, como consecuencia: el caos social.
Continuación:
Los poderes: legislativo y judicial, son instituciones aprobadas por Dios y puestas para dar paz, orden y seguridad al ciudadano honrado, así como castigo para el delincuente, teniendo incluso la autoridad divina para aplicar la pena capital al homicida. El apóstol Pablo nos explica:
“Porque los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella; porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo.” Ro.13:3, 4.
Por lo anterior, todo cristiano acata las leyes y simpatiza con los magistrados.
Es impresionante la especial responsabilidad que descansa sobre los hombros de los legisladores y de los jueces, pues ellos están para servir a Dios y aún actuar como sus vengadores. Por sus altas y delicadas funciones, tendrán que dar una cuenta muy especial ante el Juez de jueces. Al tomar conciencia de lo dicho, resulta inconcebible que un senador de la república o un juez, no esté totalmente sometido a Dios, de donde mana la esencia misma del derecho y la justicia.
Lamentablemente, estos poderes también pueden ser infiltrados y dañados, al punto de que sus representantes no ejerzan sus cargos, tal como Dios lo instituyó, lo cual no es cosa nueva; las “Escrituras” evidencian este problema en frases como: “Admitid amonestación, jueces de la tierra.” (Sal. 2:10b) y “¿Hasta cuándo juzgaréis injustamente, Y aceptaréis las personas de los impíos?” (Sal. 82:2). No olvidemos que Jesús fue condenado injustamente, totalmente fuera de derecho, por autoridades que ejercían como jueces oficiales: el procurador Poncio Pilato, de parte de Roma, y el sumo sacerdote Caifás, encabezando al Sanedrín, por parte de los judíos.
Lo anterior es lo que explica la promulgación de leyes que pueden ser totalmente contrarias a la voluntad de Dios, la cual está claramente establecida en la Biblia; lo dicho da pie para poder clasificar algunas leyes como: injustas. Del mismo modo, podemos entender, porqué una ley, supuestamente establecida para protección de la víctima y castigo del malo, se llega a aplicar de maneras tan arbitrarias que terminan produciendo un daño mucho mayor a la víctima.
De esta manera, nos encontramos con una situación dramática y compleja, por cuanto reconocemos que hay fracciones de estas autoridades instituidas por Dios, y designadas para cumplir con elevadísimas y delicadas funciones, creando y aplicando leyes que dañan a la familia y a la sociedad, limitando más y más lo que queda de autoridad en los padres, y a la muy limitada que los profesores conservadores aún mantenían.
Alrededor del mundo, sucede que a los padres se les está quitando en forma gradual y, peor aún, por medio de la ley, la autoridad dada por el Juez Supremo, y esa autoridad robada a los padres, es traspasada a instituciones seculares, que están basadas en principios materialistas y “progresistas”.
De esta forma los padres van siendo limitados para formar a sus hijos, pues si el niño transgrede los límites de moral o respeto, los padres quedan impedidos de manifestar toda la autoridad dada divinamente para con los hijos. Si los padres practican algún tipo de disciplina física o moral, el niño puede llamar a la policía y lo pueden separar para siempre de los padres, quienes pueden, incluso, ir a la cárcel.
Hay países en los que, si una jovencita queda embarazada, aun estando bajo la tutela de los padres, puede abortar amparada por la ley y sin que los padres lo sepan. Incluso los médicos no pueden revelar a los padres que la niña está embarazada, aunque sea una menor de edad y esté hospitalizada.
Si los menores de edad quieren convivir en pecado, fuera del matrimonio, algunos estados les facilitan departamentos para que vivan lejos de los padres.
Es así como Satanás ha logrado llevar a extremos la franca desobediencia al mandato que dice: “Honra a tu padre y a tu madre”, porque sabe el daño que producirá a una criatura que el odia mucho, es decir al ser humano.
Cuán importante es pedir en oración, por dirección divina para el poder legislativo y el judicial, de nuestra Nación.
“Levántate, oh Dios, juzga la tierra;” Sal. 82:8a.
Sergio O.M
Continúa el próximo jueves.
Oración
A continuación, le invito a pasar unos momentos en oración.
Adoración, Alabanza y Gratitud:
Gratitud por la paz recibida.
Me refiero a la paz, fruto del Espíritu Santo, la cual es independiente de las circunstancias, independiente de nuestro entorno y de nuestras experiencias diarias. Esta paz es otorgada, es parte de un fruto que sólo los hijos de Dios conocen, pues requiere del nuevo nacimiento espiritual.
Gratitud por las oportunidades de servir a nuestro Señor.
El cristiano que sirve al Señor está experimentando una bendición a la que fue posible acceder por medio de Cristo y su gran Obra. Los servicios son múltiples, algunos son muy notorios y otros pasan desapercibidos para los hombres; e incluyen: la oración intercesora; el compartir una palabra “sazonada”; una llamada telefónica a un hermano que necesita de apoyo. Seamos agradecidos por habérsenos concedido el privilegio de servir en la mayor de las causas.
Otros motivos de adoración, alabanza y gratitud:
Peticiones:
Intercedamos por aquellos hermanos que se encuentran agobiados.
Oremos por aquellos hermanos que, por diversos motivos, manifiestan un notorio desánimo o “enfriamiento”. ¿Motivos? hay varias causas posibles: problemas personales; sobre-stress, bajas expectativas espirituales, desilusiones humanas, problemas con la familia, etc.
Intercediendo por salud.
Mantengamos en oración a nuestra Hna. Madalina y a nuestro Hno. José, para que sus dolencias pronto sólo sean recuerdos. En forma especial, oremos por nuestra Hna. Luisa.
Por el agua necesaria.
Recientemente, el ministro de Obras Públicas informaba que: “que tenemos un año que es similar al 2019, es decir, un año que es similar al más seco en la historia de Chile». Sin duda que se trata de una situación por la que debemos orar.
Perdón por nuestras ofensas al Señor.
¿Cómo están nuestras cuentas con el Señor, estamos al día o al debe? Cuán importante es no acumular deudas, mostrando, en forma continua, un corazón humilde y contrito ante Dios, y más aún, cuando hay conciencia de pecado. Cuán fácil dejamos de considerar que estamos ofendiendo a Dios, cuando: usamos mal nuestros pensamientos; hablamos lo indebido; hacemos lo incorrecto; no hacemos lo correcto; no damos la gloria que el Señor debe recibir; no somos agradecidos; no nos comportamos como los siervos que debemos ser; etc., Si te sientes identificado, no esperes ni un minuto más, pues ya llegó el momento de arreglar cuentas y ese momento, es éste.
Amparo para nuestros hermanos perseguidos por su fe en Cristo.
Recordemos en esta oportunidad, a nuestros hermanos perseguidos por su fe en Cristo, que viven en Arabia Saudita. Se informa que los pocos cristianos sauditas de origen musulmán se enfrentan a una gran presión, especialmente, por parte de sus familias, siendo también perseguidos por los líderes de grupos religiosos no cristianos, funcionarios del gobierno, pandillas, y otros. Sean sauditas o no, la mayoría de los conversos se ven obligados a practicar su fe en forma oculta.
Otras peticiones:
Peticiones en las cuales insistir:
Nuestro País.
No dejemos de orar por nuestra Nación, pues, es como un tren que atraviesa por terrenos en los que se desata una feroz tormenta. Oremos pues, por temas como:
▪ La pandemia, que sigue manifestándose de muchas maneras.
▪ Los proyectos de ley que desafían frontalmente a la voluntad de Dios, como la ley que concierne a lo que ellos han llamado: “matrimonio igualitario”.
▪ La crisis económica que ha llegado como grave secuela del problema de la salud.
▪ El terrorismo y acciones violentistas en la Novena Región del país.
Pidamos: luz y dirección para aquellos que encabezan la Nación.
Otras peticiones en las cuales insistir:
“dando siempre gracias por todo al Dios y Padre,
en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.”
Efesios 5:20