Lectura de la Biblia
Mateo 11:28-30 (Comp.: Romanos 6:15-23)
Meditación
El Señor Jesús hizo un gran ofrecimiento:
“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.” Mateo 11:28
Esta invitación de amor del Señor Jesucristo, se aplica principalmente, a toda persona que aún necesita conocer a Cristo como su salvador; considerando las “cargas”, como los bultos y crueles amarras que el pecado ha acumulado sobre los hombros de cada ser humano que todavía no acude al Redentor para ser liberado; esto es correcto y la invitación aún sigue vigente.
Sin embargo, por extensión, esta tierna invitación, también puede ser tomada por aquellos cristianos que, a pesar de haber sido justificados por Cristo, a pesar de haber nacido de nuevo, aún se mantienen en duros “trabajos” y continúan llevando pesadas “cargas” para las cuales el Señor ya proveyó redención y descanso en la Cruz del Calvario, y que, por lo tanto, ya no deberían llevar sobre sí.
Ejemplos de cargas y trabajos, tomados de la vida diaria de no pocos cristianos, hay muchos y de diferente índole, como ser: dudas, culpas, temores, traumas, iras, tendencias deshonestas, vicios, desidia, cicatrices de la antigua vida, problemas de carácter, lengua indómita, impaciencia, problemas de personalidad, desinterés por la obra del Señor, apatía por escudriñar Las Escrituras, desamor por los hermanos en la fe, etc.
¿Te identificas con alguna de esas cargas, o tienes otras? ¿Eres una persona que habiendo sido salvada, todavía necesita ser liberada de “cargas” y “trabajos” que ya no debería llevar?
Si es así, te aseguro que el Señor Jesús desea realizar en ti, ese trabajo de descarga y liberación. Te invito a acudir al Padre y clamar de todo corazón, manifestándole tus pesos y ataduras puntuales:
“Padre Celestial, aunque soy tu hijo(a), reconozco que todavía mantengo cargas y ataduras que no me permiten disfrutar de la libertad que tu ganaste y proveíste para mí. Sé que en ti hay poder, total libertad, descanso y gozo; por ello acudo a tus pies, arrepentido(a) por las ofensas implicadas a tu gracia y te pido ser liberado(a) de todos mis “trabajos” y “cargas” que aun llevo sobre mí.
Señor, Tú sabes que yo…………………………………………………………
En el nombre de mi Salvador y Redentor, el Señor Jesucristo, amén.”
Puedes usar tus propias palabras; la oración anterior es sólo un ejemplo.
Cuando en el transcurso del tiempo se volviera a presentar alguna de estas cargas, no te amedrentes y recuerda esa promesa: “yo os haré descansar”, luego eleva una oración pidiendo fortaleza para pasar ese “valle de sombras”, y continúa gozándote, lo antes posible, en la libertad a la que fuiste llamado(a).
“Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna.” Romanos 6:22
“Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados;” Gálatas 5:13a.
S.O.M.
Oración
Para comenzar el período de oración les sugiero algunos motivos:
Adoración, Alabanza y Gratitud:
Alabemos al Señor por cuanto todo lo hizo “bueno en gran manera”.
El libro de Génesis nos relata que Dios todo lo creó “bueno en gran manera” (Gen.1:31), totalmente adecuado para nuestro bien; hecho conforme a su perfección, justicia y gran amor.
Todo el mal que hoy conocemos es el resultado del pecado del hombre.
La buena noticia es que el pecado fue derrotado por Cristo en la Cruz, y nosotros rescatados para vivir eternamente con Él.
Gratitud al Señor por habernos concedido la ciudadanía celestial.
¡Qué maravilla! Somos ciudadanos de un reino sin enfermedades, sin muerte, sin polillas, sin orín, sin ladrones, sin blasfemias, sin violencia. Es emocionante darse cuenta que, junto a nuestra redención, también hemos sido hechos ciudadanos del cielo. Lo anterior nos transforma en embajadores, en representantes de un reino muy superior al mejor reino o estado de este mundo.
Peticiones:
Los niños que conforman nuestra Escuela Dominical.
De la misma manera que lo hicimos a principios de abril, les invito a orar por los niños y profesores de la Escuela Dominical. Recordemos con cariño a los niños y profesores de: la Clases Cuna, niños entre 0 y 3 años; la Clase de Párvulos, niños entre 3 y 6 años; la Clase de Primarios, niños entre 10 y 14 años; Clase de Juveniles, jovencitos entre los 14 y los 17 años; y Clase de Jóvenes, a partir de 17 años.
Aun cuando no tienen actividades en el local de la Iglesia, los alumnos de la E. Dominical siguen requiriendo de nuestras oraciones, y más aún.
Oremos por todos los niños que se encuentran en gestación.
Hoy, como nunca, debemos interceder para que estos niños, en cualquier estado de su gestación: mórula, embrión, feto, sean muy amados por sus padres, y puedan continuar su desarrollo en forma normal y saludable. Que cualquier idea de aborto sea inmediatamente desechada y cambiada por amor y sana preocupación.
Que seamos una iglesia de oración.
Se ha comprobado que una práctica muy descuidada en muchas iglesias en nuestro siglo, es la oración. Este descuido se transforma, entre otros, en una puerta abierta para: la tentación, el desánimo, el desapego a Las Escrituras, la introducción de ideas foráneas, el desamor hacia Dios, el ataque espiritual a nuestras familias. Además, deja desprotegida a la iglesia local. Pero, por sobre todo, es una ofensa a aquel que espera oír nuestra voz con frecuencia.
Por las consecuencias económicas de la pandemia.
Como producto de las alteraciones laborales asociadas a la pandemia, se han hecho notorios los problemas económicos que afligen a muchas personas. Oremos por ellos, especialmente por los que son hermanos en la fe.
Por protección y nuevas fuerzas para los feligreses.
Les motivo a continuar orando por los miembros de las iglesias que por no estar asistiendo a sus locales de reunión, se puedan sentir desorientados, dejando prácticas esenciales de sostén y crecimiento para el cristiano.
Las Iglesias Bíblicas: La Iglesia Bíblica Lo Prado.
Durante esta semana oremos por su pastor, el Hno. Alfonso Orellana, su familia y todas las personas que tienen la responsabilidad de administrar en esa congregación hermana.
Peticiones en las cuales insistir:
Por los hermanos más expuestos al contagio.
Pidamos protección del Señor para los hermanos que se encuentran más expuestos a infectarse con el coronavirus; especialmente los hermanos que trabajan en el área de la salud.
Salud y ánimo para nuestros hermanos mayores.
Creo importante, insistir en la oración por nuestros ancianos; pidiendo al Señor que no se desanimen y les ayude a llevar sus dolores y molestias físicas, así como aquellas cargas emocionales tan propias de la ancianidad. Llevemos también ante el Señor, a aquellas personas que los cuidan y atienden. Hoy en día es también importante pedir por protección debido a la pandemia que les afecta en forma especial.
Por lluvias.
Persistamos en nuestra petición por lluvias para la Región Metropolitana y sus alrededores.
Por las autoridades que gobiernan nuestra Nación.
Pidamos a nuestro Señor que guíe y ponga en los corazones de las autoridades temor reverente hacia él, así como voluntad y valor para obedecer sus decretos eternos. Insistamos en protección y dirección para gobernar en estos momentos de crisis sanitaria y social.
Mis motivos personales de oración:
Te agradezco Señor por ………………………………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………………………………
“orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;” Efesios 6:18
El devocional familiar
TERCERA PARTE
En el día de hoy avanzaremos hasta llegar a la forma práctica de realizar nuestro devocional personal.
V) ¿Cuánto tiempo debo dedicar al devocional?
Dependiendo del tiempo, salud, fuerzas y circunstancias (trabajador activo o jubilado; soltero o casado; en etapa de criar niños, o ya con hijos mayores; etc.), será la duración y los elementos con que contará el devocional. Se pueden incluir, cánticos o himnos, una lectura del A. Testamento y otra del N. Testamento. Una oración al iniciar y otra al concluir.
Su duración pude variar desde los 5 minutos hasta 1 hora o más, dependiendo de las circunstancias antes mencionadas.
El devocional puede estar basado en un libro de la Biblia o en un tema bíblico que se irá desarrollando, día a día.
Ahora bien, es sabido que es más fácil comenzar, que continuar con ésta práctica; es una tarea que debes imponerte con la ayuda del Señor. Luego, de un tiempo se irá haciendo más sencilla y deleitosa.
VI) ¿Qué tan complejo debe ser mi devocional?
La complejidad dependerá del tiempo disponible y la práctica que se haya tenido antes con devocionales. Considerando la complejidad podemos dividirlos, al menos en tres tipos:
Algo previo: a) Escoger, en oración, un libro de la Biblia.
b) Seleccionar por día una cantidad de versículos consecutivos y leerlos, al menos, tres veces.
1) Devocional muy elemental.
a) Oración.
b) Lectura de una porción bíblica.
2) Devocional sencillo. (Aconsejable para el devocional familiar)
a) Oración.
b) Lectura de una porción bíblica.
c) Análisis elemental de la porción bíblica.
Preguntarnos: “¿Qué dice el pasaje?” Contestamos esto leyendo varias veces el texto. Deje que el pasaje bíblico hable por sí mismo en su marco original, histórico y cultural.
El segundo paso es preguntar: “¿Qué significa?” Dentro del pasaje bíblico hay una verdad espiritual eterna significativa para todos los tiempos.
Por último, siempre en una atmósfera de oración, tenemos que preguntarnos: “¿Cómo aplicar esa verdad?” El Espíritu Santo que mora en nosotros cambiará nuestros pensamientos, habla y conducta, cuando le permitamos usar los principios espirituales que encontramos en la Palabra de Dios.
3) Devocional completo. (Aconsejable para el devocional personal)
ESQUEMA GENERAL
MI DEVOCIONAL PERSONAL
Estudio N° ___________
Fecha: ________________
ORACION: Introductoria al tiempo devocional.
La porción bíblica a ser estudiada se encuentra en: Escribir la cita bíblica.
En este espacio se puede copiar la porción a ser estudiada, cuando no es muy extensa.
Tema: ______________________________________________________-
Título: ______________________________________________________
Cuando se estudia, por ejemplo, una carta apostólica, no es necesario repetir en cada sesión, los siguientes cuatro ítems, pues no varían en toda la carta.
Autor: ______________________________________________________
Destinatario(s): Puede(n) ser: Una o varias persona, una o varias iglesias, abierto a todo un grupo de personas, …
Lugar(es) geográfico(s): ______________________________________________________
Objetivo o énfasis del libro: Al iniciar el estudio de un libro de La Biblia, es importante buscar la razón por la cual se escribió dicho libro o carta.
Personaje(s): ______________________________________________________
Palabra(s) más destacada(s): ______________________________________________________
Versículo más significativo: Esto es aplicable cuando la porción estudiada implica varios versículos.
Significado de palabras importantes u oscuras: ______________________________________________________
Citas paralelas o afines: ______________________________________________________
Análisis y comentarios: Preguntarse: ¿Qué dice el pasaje? ¿Qué significa? Luego, comentar: primero que nada comentarios personales; luego, se pueden añadir los que aparecen en libros de buenos comentaristas. Se recomienda escribir, con el fin de averiguar en forma posterior, las partes que resultaron oscuras y las que provocaron dudas.
Aplicación(es) personal(es): ______________________________________________________
¿Cómo puedo aplicar estas verdades a mi vida? ______________________________________________________
ORACIÓN: Pidiendo al Señor capacitación para aplicar las lecciones aprendidas.
Cánticos: Opcional.
Ahora, a la práctica. El próximo jueves veremos ejemplos de devocionales desarrollados. Mientras tanto, usted ya puede comenzar a practicar.
🙫 Puedes descargar este esquema de tu devocional personal en word aquí: