Muy apreciados hermanos en la fe:
Como consecuencia de los tiempos turbulentos que estamos experimentando, la confianza y la paz de algunos hermanos pueden estar resentidas asomándose en sus vidas incertidumbres y angustias.
Considerado esto, el apóstol Pablo, antes de concluir su primera carta a los hermanos de Tesalónica, les decía: «También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos.» (1ª Tesalonicenses 5: 14).
El Señor nos ayude a ser efectivos pilares que apoyen «a los de poco ánimo» y «débiles» que se encuentran cerca de nosotros. Apoyémonos unos a otros recordando siempre que somos del Señor, y nuestro presente y futuro se encuentran en sus tiernas, sabias y poderosas manos.
Sergio Oschilewski Malinowski
Pastor Iglesia Bíblica Las Condes
Lectura Bíblica
Mateo 24: 23-28.
Introducción
Durante las últimas décadas se ha incrementado en forma exponencial la divulgación constante de tres ideas: la tierra pronto sufrirá de devastaciones sin precedentes; la raza humana está a punto de sufrir cambios tan grandes que le harán olvidar todo lo presente, incluyendo su condición de humanos; muy asociado a lo anterior, destaca la idea repetitiva de que el mundo está a punto de entrar en contacto con inteligencias extraterrestres.
Muy asociado a lo anterior, se aprecian dos líneas: una que se aferra al naturalismo (materialismo) y otra que incorpora componentes religiosos, ya sea cristianos, hindúes, budistas, animistas y otros.
Es tan grande el cúmulo de ideas confusas que nos rodea, que me ha hecho pensar y sentir, que una vez más se hace necesario tocar, desde el púlpito, aspectos de la doctrina que trata sobre los últimos tiempos y la venida del Señor.
Esto es delicado, pues el Señor Jesucristo nos advierte que ya sea por la proliferación de los falsos profetas, por la debilidad de sus hijos o, bien, por las notorias señales que exhibirán estos embusteros, «engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos» (Mateo 24: 24).
Entremos pues, en materia:
- Gran confusión sobre los tiempos.
- Dios no ha revelado la fecha de la «Segunda Venida».
- Muchos profetas falsos.
- Dios, en lugar de fechas, nos ha dado señales.
Conclusión
Instantes antes de ascender a los cielos, los que acompañaban al Señor le preguntaron: «Señor, ¿restaurarás el reino a Israel en este tiempo? Y les dijo: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad;» (Hechos 1: 6b-7). Definitivamente, hay cosas que el Señor no quiso revelar a sus discípulos, especialmente lo que se refiere a la fecha de su regreso. No obstante, nos dejó tareas y abundancia de señales para ser reconocidas por aquellos que velan y están atentos; señales que advierten y recuerdan que ese retorno está cerca.
Entre tanto que voy, ocúpate en la lectura, la exhortación y la enseñanza.
1ª Timoteo 4: 13