Los principios divinos constituyen salud para una nación

En víspera de las celebraciones patrias, inclinamos nuestras cabezas y elevamos nuestros corazones para dar gracias a Dios por la tierra que nos ha otorgado para vivir y desarrollar el proyecto de vida que nos ha comisionado.

Demos gracias por la libertad que aún tenemos para experimentar y compartir por doquier la verdad que nos ha sido revelada por medio de las Escrituras. Demos gracias por los grandes tesoros que encierra la tierra, el mar y el cielo de Chile.

Demos gracias por la variada belleza que encontramos a lo largo de esta bendita franja de tierra encabezada por un árido desierto que concluye en las frías aguas de la región antártica.

Demos gracias por la paz, la libertad, la autonomía y la prosperidad que disfrutamos.

También, oremos pidiendo misericordia por la ingratitud y ofensas que autoridades, legisladores, así como sectores del pueblo se han atrevido a proferir contra el eterno y santo Dios vivo.

Roguemos para que Dios abra los entendimientos de las autoridades, para que sus corazones se enternezcan y sus rodillas se dobleguen ante la soberanía de aquel de quien emana todo derecho legítimo y eterno.

Sergio Oschilewski Malinowski
Pastor Iglesia Bíblica Las Condes




Lectura Bíblica

Salmos 66: 1-8.

Introducción

El salmo 66 nos decía que los ojos de Dios: «atalayan sobre las naciones; Los rebeldes no serán enaltecidos.» (Salmos 66: 7b). Aún cuando se trata de un salmo mesiánico que contiene muchos elementos proféticos, podemos rescatar grandes principios para el día de hoy, pues sabemos que los ojos de Dios sí se encuentran mirando en estos mismos momentos a los buenos y a los malos, incluyendo a todas las naciones como tal, con sus gobernantes y príncipes, esperando pacientemente que se sometan a Su señorío, de lo contrario, «no serán enaltecidos» sino que serán deshechos para siempre en el «juicio de las naciones» o, incluso, antes.

Lo anteriormente dicho, lo vemos muy bien reflejado en Proverbios 29: 18 donde se enseña que: «Sin profecía el pueblo se desenfrena; Mas el que guarda la ley es bienaventurado.». Nuevamente, tenemos que decir que tiene una aplicación particular para Israel, pero también para todos los pueblos de la tierra.

Consideremos las siguientes ideas:

  1. Profecía.
  2. Efecto de la falta de profecía.
    • Razones de la falta de profecía.
    • Efectos de la falta de profecía.
  3. Beneficios de conocer y aplicar la profecía.

Conclusión

Una nación no será mejor por un buen e ingenioso programa político, eso podrá ayudar un poco. Lo que realmente hace grande a una nación y felices a los ciudadanos, es oír y poner en práctica la voluntad de Dios.

Toda constitución política debiera considerar como fundamental establecer que la nación se somete a los derechos divinos y que toda ley que se promulgue deba considerar este punto.

¿Fantasía, utopía, locura? No, pues es un principio establecido por Dios.

Reinos de la tierra, cantad a Dios, cantad al Señor

Salmo 68: 32

Predicador

Pastor Sergio Oschilewski Malinowski

Fecha

17 de septiembre de 2023

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