Y a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: Al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos.
Apocalipsis 5:13
Pasaje bíblico: Hebreos 10:19-25
Introducción
Sin duda el libro de Hebreos es un importante fundamento de nuestra fe, porque nos habla de un gran personaje de la historia, ese personaje es Cristo. Es un libro en el que, a medida que se lee, uno se achica más y más, mientras la figura de Cristo crece y toma, realmente, la posición que le corresponde.
La pequeña porción que leímos hoy, me deja muy en claro que la fe en Cristo es superior a cualquier confianza que cualquier hombre pueda tener. Esta porción me indica, claramente, donde descansa mi fe y porque debemos tener confianza en ello. Ya en el segundo versículo nos habla de algo nuevo y superior a todo lo conocido.
- Un nuevo camino. El autor de Hebreos nos habla de un camino nuevo y vivo que abrió el propio Jesucristo con su sacrificio.
- Un nuevo sacerdote. Aunque los creyentes son llamados sacerdotes y ejercen esa labor, solo Cristo es el sumo sacerdote.
- Una nueva esperanza. Mis esperanzas se basan en Cristo y en sus promesas.
Conclusión
Se acercan tiempos de Navidad, la cual muchos creen, es el comienzo de una bella historia, pero, en realidad, es casi la conclusión de un gran anuncio que hizo Dios, ya en el jardín de Edén. Esto es tan solo una parte de la historia, que luego del nacimiento, terminó, en forma terrenal, en la Cruz.
Esa historia tiene dos protagonistas: Cristo y alguien más, ese alguien más eres tú. Cristo ya hizo su parte, el siguiente paso te corresponde darlo a ti. De ti depende como termine la historia. Cristo quiere que termines en sus brazos y en ese lugar santísimo, el Cielo mismo. ¿Qué quieres tú?