Amados hermanos en Cristo Jesús:
Creemos que tras la independencia de Chile se encuentra la soberanía de Dios con propósitos sublimes que parten por el cuidado y extensión del Reino de Dios en los corazones para este lugar de la América austral. Con ello, debemos dar gracias por héroes patrios que motivaron la entrada y el uso de la Biblia con sus principios eternos.
Hoy, debemos orar para que la insensatez dé lugar a la razón, las bocas blasfemas sean calladas, la maldad sea castigada; el trabajo responsable sea prosperado, las familias sean amparadas, el pueblo de Dios busque la santidad y la luz del Evangelio ilumine cada rincón de esta hermosa tierra.
Reinos de la tierra, cantad a Dios, cantad al Señor
Salmos 68: 32
Pastor Sergio Oschilewski Malinowski
Iglesia Bíblica Las Condes
Lectura Bíblica
Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres. Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres?
Juan 8: 31-36
Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo sí queda para siempre. Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
Introducción
El 18 de septiembre celebrábamos doscientos quince años del establecimiento de la primera junta nacional de gobierno. Un hito que marcó el inicio de la independencia de Chile como colonia para transformarse en una nación libre y soberana. Es una fecha significativa, pues hablamos de un cambio de condición: de subyugados a independientes; de sometidos a libres.
Los cristianos damos gracias a Dios por ello, pues significó muchas cosas buenas que van más allá de lo que el pueblo y las autoridades suelen recordar en sus discursos de fiestas patrias.
La independencia implicó que, al ser independientes, se pudiera ingresar un libro que estaba totalmente prohibido para el pueblo común, tanto distribuirlo como leerlo: me refiero a la Biblia.
Estuvo prohibido para el pueblo común durante todo el período colonial, tanto la posesión como la lectura de la Biblia, especialmente en la lengua del pueblo. Pero, la independencia permitió que en 1821 entraran las primeras biblias en forma legal al país.
Fue don Bernardo O’Higgins, quien había conocido mucho de la Biblia durante sus estudios en Inglaterra, quien invitó a Chile al pastor bautista Diego Thompson. Thompson fue un pastor escocés, quien además era educador y colportor de la Sociedad Bíblica Británica, quien trae consigo, en el año 1821, las primeras Biblias al país.
No podía ser de otra manera, pues no hay independencia completa si el mensaje libertador de la Biblia no se hace presente y efectivo en las vidas de los ciudadanos de un país. Todo hace pensar que don Bernardo O’Higgins así lo entendió y por ello no tardó en entregar la Biblia al pueblo.
En la Biblia encontramos al Hijo de Dios dándonos una libertad plena, que supera cualquier libertad física que pudiéramos alcanzar.
- Libertad para entrar al lugar santísimo (Hebreos 10: 19).
- Libertar de conciencia (Salmo 62: 1).
- Libertad de toda opresión (Lucas 4: 18).
Conclusión
Aun cuando hemos conmemorado lo que más tarde se transformó en la completa independencia de la nación y, con ello, la libertad para decidir sobre nuestro destino, la pregunta del día es ¿cuán libre soy realmente? ¿Soy libre con la triple libertad que solo Cristo puede otorgar?, ¿soy ya libre para entrar al cielo?, ¿es mi conciencia totalmente libre de culpa?, puedo declarar que soy libre de toda opresión esclavizadora?
Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
Juan 8: 36