Cita Bíblica: Proverbios 24:3-5
Introducción: El amor por nuestros hijos hace que deseemos lo mejor para ellos. Queremos que tengan muchas herramientas para defenderse en la vida. Queremos que tengan todas las armas para luchar contra los desafíos que se les presenten. Anhelamos que encuentren todo el amor y ternura que es posible encontrar.
También, queremos que sean personas sabias, que no se dejen manipular; que manifiesten principios firmes; de palabra; que no mientan; que sean capaces de ir contra la corriente, aún cuando el pensamiento popular les sea contrario.
Aún cuando no queremos su sufrimiento, esperamos que sean capaces de sufrir por no seguir una causa injusta: que tengan la capacidad de un Noé, de un Jeremías de seguir proclamando la verdad aunque se queden solos en el mundo.
También aspiramos a que sean personas sin egoísmo, que sepan amar a sus cónyuges e hijos.
¿Cómo lograr todo esto?
El libro de Proverbios nos habla de edificar una casa con sabiduría, afirmarla con prudencia y llenarla con ciencia, de todo bien preciado y agradable. A veces no nos damos cuenta de que ahí están las claves para lograr lo que buscamos para nuestros hijos.
Hoy quiero presentar a los padres y madres aquí presentes, una serie de elementos y herramientas bíblicas que les ayudarán a cumplir con las elevadas aspiraciones que tenemos para con nuestros hijos. El primero de ellos es:
I. LA REGLA
A) La Importancia De Las Reglas, Su Establecimiento Y Su Cumplimiento
B) Reglas Para Los Padres
C) Reglas Para Los Hijos
II. EL MARTILLO
III. UN MAESTRO EXPERIMENTADO
A- Es íntegro.
B- Intercede.
C- Enseña.
D- Reconcilia.
E- Bendice.
IV. LA TIJERA DE PODAR
Conclusión: La ciencia aumenta, la tecnología se perfecciona, los medios de comunicación llegan a niveles de ciencia ficción, sin embargo, el hombre no sabe cómo enfrentar los problemas más elementales de la vida y la existencia, tales cómo: encontrar paz; tener una conciencia totalmente sosegada; lograr un estado de gozo que dure en el tiempo; lograr un matrimonio estable y feliz y ser un buen padre, una buena madre.
Apegándonos a lo que dice la Biblia y a la experiencia diaria, se puede asegurar que estas y otras cosas, no se pueden alcanzar si el hombre no se vuelve totalmente hacia Dios y Su Palabra.
Dios es el autor de la paz, el gozo perdurable; solo por medio de un encuentro con él podemos alcanzar una conciencia auténticamente sosegada. Solo en El se encuentra la estabilidad y la felicidad del matrimonio y solo apegándonos a Él, encontraremos la manera de ser el padre o la madre que cumplirá con las expectativas que Dios mismo tiene para quienes ejercen esas elevadas funciones.