Muy apreciados y recordados hermanos en Cristo Jesús:
Cada día que pasa, los cristianos nos damos cuenta de que requerimos de más tiempo y comunión con nuestro Señor. El medio se hace cada vez más hostil y nuestra presencia estorba al mundo el cual nos lo hace sentir todos los días. El apóstol Pedro dijo hace ya tiempo: “Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración.” (1ª P.4:7). Pienso que estas palabras son hoy más frescas que cuando se dijeron, pues es evidente que la maldad a nivel mundial, a alcanzado niveles cada día mayores y la apostasía es también global y en expansión. Por ello, y mucho más, la Venida del Señor por su Iglesia no puede estar muy distante.
Les saludo recordando la exhortación del apóstol Pablo a los Efesios: “Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo.” (Ef.6:11)
Sergio Oschilewski M.
Pastor IBLC
Reunión de Oración
Oración
Cánticos a elección
www.iglesiabiblicalascondes.cl
(Alabanzas 🠚 Himnos/Cánticos)
Lectura de la Biblia
Colosenses 2:1-7
Reflexión: Verdad y Mentira – Parte IV
El resultado visible del engaño diabólico III
Resumen de lo visto:
Hemos estado reflexionando en cómo la mentira ha impregnado a la sociedad, haciendo evidente el persistente trabajo de Satanás en ella.
Hoy día, continuaremos viendo algunos de los frutos más evidentes del engaño.
Continuación:
La lista de engaños y de sus frutos es muy extensa y no es la pretensión de esta breve reflexión, acabar con ella. No obstante, añadiré un par de elementos más.
▪ El engaño doctrinal:
Un capítulo que por su importancia y extensión merece un trato aparte y preferencial, es el que trata del engaño que tiene que ver con la doctrina y los grandes principios espirituales. De alguna manera, gran parte del poder global del engaño se encuentra en la ignorancia o desprecio de las verdades bíblicas, por lo que podemos llegar a deducir el siguiente axioma:
| A mayor distancia de la Biblia y sus enseñanzas, más efecto surtirá la mentira. |
Entre las mentiras de carácter espiritual de mayor circulación, están: “las buenas acciones pueden llegar a salvar a una persona”, “no puede ser condenado el que desconoce las verdades bíblicas”, “una persona totalmente sincera en lo que cree tiene que ser salva”, “no es necesario leer la Biblia, pues el Espíritu guía directamente al creyente”, y muchas más. Todas las falsedades recién mencionadas y promovidas por religiones, sectas y librepensadores, han enviado al Infierno a incontables multitudes de personas.
La Biblia es tan, pero tan clara en cuanto a conceptos como: el origen del universo y del hombre, la razón de nuestra existencia, la salvación, la condenación, el pecado y el mal, la vida futura, la misión del ser humano en el presente, y, en realidad, en cuanto a todo lo que necesitamos saber para vivir y desarrollarnos en plenitud, que no debiera haber confusión al respecto, pero, las personas prefieren oír a los maestros mentirosos antes que a la Carta dejada por Dios para ser leída por toda criatura y así tener las respuestas fundamentales y una guía para vivir la vida presente y también la futura.
La presencia del engaño doctrinal se manifiesta de múltiples maneras, por ejemplo, por medio de: corrientes de doctrina que se introducen en las iglesias sanas usando a creyentes débiles; sectas falsas; religiones falsas; corrientes filosóficas; movimientos políticos. Incluso, por medio de algunas actividades: recreativas, deportivas, artísticas, terapéuticas (medicinas alternativas), educacionales, etc. En otra oportunidad, podemos profundizar en alguno(s) de estos puntos.
El Señor ha expresado su clara voluntad en cuanto a que sepamos la verdad y que no nos dejemos engañar, primeramente, en el ámbito espiritual; Pablo les decía a los hermanos de Colosas: “Y esto lo digo para que nadie os engañe con palabras persuasivas.” (Col.2:4). Luego, a los hermanos de Éfeso les dice: “Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia.” (Ef.5:6). ¡Mucho cuidado con las palabras vanas y persuasivas! Algunas se encuentran, incluso, en libros que se venden en “librarías cristianas.”
Para que nadie logre engañar a los redimidos, Dios nos ha dejado, fundamentalmente, cuatro elementos que todo cristiano debiera conocer muy bien y jamás descuidar:
A) Su Palabra, La Biblia: el Señor Jesús reprende a los saduceos, diciéndoles: “Erráis, ignorando las Escrituras” (Mateo 22:29b). El apóstol Juan dice en su primera carta: “y la palabra de Dios permanece en vosotros, y habéis vencido al maligno” (1ª Jn.2:14b). El salmista inspirado escribe: “Me has hecho más sabio que mis enemigos con tus mandamientos” (Sal.119:98).
B) Su Espíritu, que nos guía e ilumina: Jesús enseñó: “Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda verdad” (Jn.16:13a). Luego, Pablo nos aclara que: «todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.» (Ro.8:14).
C) La Oración, con la cual llegamos hasta el mismo trono celestial: En la carta a Los Hebreos se nos dice: “Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.” (Heb. 4:16). Sí, socorro para no ceder a la tentación, pero también, socorro para no ser engañado, socorro para no ser desviado de la búsqueda permanente de lo verdadero, lo honesto, lo justo, lo puro, lo amable, lo virtuoso. Es Jesús quien dice: “Velad y orad, para que no entréis en tentación;” (Mat. 26:41a).
D) Los hermanos en la fe que forman parte de la iglesia en la cual nos congregamos. Una de las razones por la que se han dado los dones y los ministerios, la explica el apóstol Pablo en la carta a Los Efesios, ella es: “perfeccionar a los santos” que conforman la Iglesia. Pablo explica que: “él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo,” (Ef.4:11, 12)
El que se apropia y usa correctamente estos elementos, tendrá una enorme ventaja sobre el resto de la humanidad, y aún sobre sus hermanos en la fe, pues, no sólo conocerá la verdad, sino que también adquirirá la capacidad para separar la verdad de la mentira cuando se le presenten juntas, esto es el discernimiento espiritual.
Sergio O.M.
Continúa el próximo jueves.
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Oración
A continuación, le invito a pasar unos momentos en oración.
Adoración, Alabanza y Gratitud:
Gratitud por haber quitado nuestros pecados.
Por medio de su sacrificio Cristo expió nuestros pecados, es decir: los quitó. Él logró lo imposible, pues hizo lo que nada ni nadie podía. Pensemos que ni toda la sangre de los miles de sacrificios del A. Testamento pudieron quitar, aunque fuese, un solo pecado. Demos gracias a nuestro Salvador por sacar de sobre nosotros algo tan horrible y que, además: nos condenaba por la eternidad.
Por su misericordia sin medida.
La misericordia de Dios se manifiesta de muchas maneras: dando la lluvia a justos e injustos; haciendo salir su sol sobre malos y buenos (Mat.5:45); haciendo que proyectos retorcidos que se debaten en el Congreso, sean retrasados; librándonos, día a día, de muchos males. Demos gracias por esa misericordia que da oportunidades al inconverso y nos libra de muchas angustias a los redimidos.
Peticiones:
Por el regreso a las actividades presenciales.
Pidamos por sabiduría, dirección y protección, para el progresivo retorno a las actividades en el edificio de la Iglesia.
Pidamos por protección espiritual y física para nuestra Iglesia.
El apóstol Pablo en su discurso de despedida en Mileto, advierte: “Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño.” (Hch. 20:29). Sabemos que esta advertencia no es sólo para los que escuchaban al Apóstol, sino para todas las iglesias de su tiempo y las que vendrían.
Es indispensable orar por protección para nuestra iglesia; que sea liberada de toda forma de agresión. No le demos ventaja al adversario y pongamos ante el Señor, a quienes conforman nuestra iglesia, incluyendo el edificio que Dios nos ha proporcionado.
Oremos por auxilio para no dormitar mientras esperamos el regreso del Señor.
El Señor no se olvida ni se tarda, sólo es paciente y amoroso con aquellos que aún caminan en la oscuridad. Alentémonos unos a otros con la consigna: velad y estad firmes en la fe, pues ya regresa.
Amparo para nuestros hermanos perseguidos por su fe en Cristo.
Recordemos en esta oportunidad, a nuestros hermanos perseguidos por su fe en Cristo, que viven en Laos, un país del Sudeste Asiático con un estado comunista. Se informa que: “Las actividades cristianas están fuertemente vigiladas por las autoridades comunistas, incluyendo las de las iglesias registradas. Especialmente en las zonas rurales, las iglesias en las casas se ven obligadas a reunirse en la clandestinidad ya que son consideradas como «reuniones ilegales».
Peticiones en las cuales insistir:
Por el agua necesaria en nuestra región.
Sigamos pidiendo al Señor misericordia para nuestra región y que nos proporcione el agua y la normalización del clima que ya no reconocemos.
Nuestra Nación y sus autoridades.
Que Dios dirija más allá de la voluntad carnal, a todas las personas que componen el gobierno de nuestro país. Que el poder legislativo se vea impedido de promulgar nuevas leyes que desafíen al eterno y perfecto Derecho Divino.
“Orad sin cesar.” 1ª Tes.5:17
