Queridos y recordados hermanos en la fe:
En el boletín del jueves 28 de enero consideramos cinco principios fundamentales que todo cristiano está en la obligación de practicar, si quiere llegar a tener una vida espiritual próspera y que agrade al Señor. En esta oportunidad veremos otros cinco principios que el cristiano debe poner en práctica, pero esta vez se relacionan con el diario vivir entre los miembros que conformamos la Iglesia.
Les saluda, anhelando que cada día la unidad de nuestra congregación sea más fuerte y que el Señor reciba más y más: honra y gloria.
Sergio Oschilewski M.
Pastor IBLC
Reunión de Oración
Oración
Cánticos a elección
Recuerde los himnos y cánticos que se encuentran en nuestra Página.
Lectura de la Biblia
Colosenses 3:10-17
Reflexión: 5 principios relacionados con mis hermanos en la fe
Dijimos antes que: “Dios nos ha dejado principios y tareas para desarrollar durante nuestra nueva vida, y con ello, nos ha mostrado claramente lo que espera de nosotros”. En esta oportunidad, le comparto otros 5 principios, pero esta vez relacionados con nuestros hermanos en la fe.
Las siguientes prácticas también deben llegar a constituir parte integral de nuestra vida, en el Cuerpo del Señor, Su Iglesia.
1.- Amar al hermano como Cristo nos ama.
“Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.” Jn. 13:34-35.
“Porque éste es el mensaje que habéis oído desde el principio: Que nos amemos unos a otros.” 1ª Jn. 3:11.
2.- Evitar dañar al hermano débil.
Se entiende por un “hermano débil” a todo hermano nuevo en la fe, o bien, a uno que aún no ha logrado llegar al nivel de madurez que tú posees.
“Todo me es lícito, pero no todo conviene; todo me es lícito, pero no todo edifica. Ninguno busque su propio bien, sino el del otro.” 1ª Co.10:23, 24.
“Así que, ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano.” Ro. 14:13.
3.- Hacer de soporte para el hermano débil.
Muy ligado al principio anterior se encuentra el que nos insta no sólo a no dañar o escandalizar al hermano más débil, sino que también a apoyarlo y ayudarlo en su crecimiento.
“Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz;” Ef. 4:1-3.
“Así que, los que somos fuertes debemos soportar las flaquezas de los débiles, y no agradarnos a nosotros mismos.” Ro.15:1.
4.- Desarrollar y aplicar con diligencia, los dones que el Señor nos dio.
Recordemos que los dones del Espíritu son otorgados, primordialmente, para que la Iglesia sea beneficiada por medio de ellos.
“Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios.” 1ª P.:4:10.
“De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el de profecía, úsese conforme a la medida de la fe; o si de servicio, en servir; o el que enseña, en la enseñanza; el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el que hace misericordia, con alegría.” Ro.12:6-8.
5.- No apresurarse a hablar, ni a enojarse.
Este principio, además de tener una aplicación muy práctica al interior de la Iglesia, también lo tiene fuera de ella.
“Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse;” Stgo. 1:19.
“Como ciudad derribada y sin muro es el hombre cuyo espíritu no tiene rienda.” Pro. 25:28.
Pidamos al Señor iluminación para entender cómo aplicar estos grandes principios, y también voluntad para llevarlos a la práctica.
Seguramente, en más de una oportunidad encontraremos las tareas demasiado difíciles; pues no siempre será sencillo relacionarse con algún hermano. No obstante, es imprescindible recordar que Dios no pide nada imposible y es Su poder el que nos capacita para realizar Su voluntad.
Como en la oportunidad anterior, también le sugiero que, durante cada día de la semana, a partir de hoy, lea en la mañana estos cinco principios y le pida al Señor, poder y voluntad para llevarlos a cabo. Como una tarea especial, le invito a buscar, al menos, una porción bíblica más, para agregar a cada punto.
Sergio O.M.
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A continuación, le invito a pasar unos momentos en oración.
Oración
Adoración, Alabanza y Gratitud:
Gratitud al Señor por permitirnos deleitarnos en Su Palabra.
El Señor no solo nos instruye por medio de Su Palabra, sino que también nos permite gozarnos y deleitarnos en ella. El salmista canta gozoso:
“¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabras! Más que la miel a mi boca.” (Sal.119:103).
La palabra del Señor tiene la virtud de dar paz y producir un gozo sobrenatural al que escudriña en ella.
Gratitud por tener una vida colmada de divinos proyectos.
Solo un encuentro “efectivo” con Cristo colma con propósitos la existencia personal. No se trata de cosas simples, sino de grandes proyectos, los cuales llenan de sentido la vida en el presente, y la proyectan majestuosa hacia el mañana, más allá del sol y las estrellas.
Otros motivos de adoración, alabanza y gratitud:
Peticiones:
Las decisiones que nuestros jóvenes deberán tomar respecto a sus estudios.
Por la importancia que reviste, sigamos apoyando en oración a nuestros jóvenes que se encuentran en proceso de postulación a los centros de formación superior.
La Escuela Dominical.
Mantengámonos firme orando por la primera parte del plan para dar inicio a la Escuela Dominical, mediante la plataforma Zoom. El Señor guíe a los organizadores y profesores, en este proyecto.
Oremos por los alumnos de la E. Dominical.
Continuando con nuestro plan de oración por los alumnos de la E. Dominical, hoy les invito a orar por aquellos que pertenecen a la clase de jóvenes.
Sabiduría para dar un buen uso a nuestros sentidos.
¡Qué maravillosos son nuestros sentidos!: la visión, el oído, el gusto, el tacto y el olfato. Todo lo bello que nos rodea nos llega por medio de ellos; pero, también, mucho de lo malo se suele infiltrar, usándolos como vía de ingreso. Pidamos sabiduría al Creador de ellos para darles un uso sabio y edificante, que el ver, el oír, el gustar, el tocar y aún el oler, estén totalmente subordinados a nuestro Señor.
Por nuestros hermanos en el extranjero.
En nuestro plan de oración de apoyo a nuestros hermanos en otros países, este jueves les invito a orar por la iglesia que se encuentra en el pequeño país llamado, San Cristóbal y Nieves, considerado el estado soberano más pequeño de América, situado en el Caribe.
Otras peticiones:
Peticiones en las cuales insistir:
Nuestro país.
No dejemos de orar por nuestra amada nación tan golpeada por los manipuladores de masas, terroristas y delincuentes comunes. En esta oportunidad les invito a orar por:
▪ Nuestros cuerpos de orden y seguridad que diariamente nos protegen, exponiéndose a muchos peligros, siendo provocados constantemente por delincuentes y voceros públicos inescrupulosos.
▪ Un cambio en la manera de operar del poder judicial con tal de que los delincuentes vuelvan a temer y no la población honrada.
▪ Por un alto al terrorismo y a quienes los apoyan, especialmente en el Sur del País.
Sigamos pidiendo por: luz y dirección para aquellos que encabezan la Nación y que nuestro Señor ate las muñecas y cierre las bocas de aquellos que promueven el pillaje, la rebelión y la blasfemia.
“Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado.” Isaías 26:3
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