No culpemos al año

Despidiendo un año y recibiendo a uno nuevo

Oración 

Cánticos a elección 

Puede hacer uso de los himnos y cánticos preparados en nuestra Página. 

Lectura de la Biblia 

Salmo 46 

Cánticos a elección 

Reflexión: No culpemos al año 

 Hoy concluye un año que para muchos fue difícil y quizás tú mismo estés pensando en algo así como: “por fin se va este año” o “ya era hora que se terminara este año tan lleno de problemas”. Sin embargo, él, o los problemas, no se relacionan con el tiempo, ni con los astros, ni con los ciclos de la naturaleza; los problemas se relacionan con algo que es más estable, y que no cambia para bien con el paso de los años. El  problema se encuentra, y así lo dice Dios, en el corazón del hombre.

“Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las  blasfemias.” (Mat. 15:19). 

 Muchos siglos antes, ya se dijo:

“Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo  conocerá?” (Jer. 17:9). 

 Y muchos milenios antes ya se había establecido que:

“el intento del corazón del hombre es malo desde  su juventud;” (Gén. 8:21).

Razón que llevó al ser humano a tal punto de decadencia que Dios decidió enviar el  juicio del diluvio universal destruyendo a toda carne, con la excepción de Noé y su familia cercana. 

 No, no es el tiempo, ni los cambios de estaciones, ni los lugares, ni las circunstancias, lo que trae o  posee, el o los males; es el corazón del hombre que fue dañado irremediablemente por el pecado tornándose en una fuente de dolor, amargura, engaño y blasfemia; por lo que el mal acompañará al ser  humano a donde vaya, aunque sea a una isla paradisíaca alejada de toda contaminación; pues, no sanarás  de cáncer por abandonarlo todo e irte a vivir a las Islas Canarias, el cáncer va contigo, si es que no acudes  primero a un médico experto para que te cure. Al igual que el cáncer, el pecado va en el corazón de toda  persona que no ha ido al médico divino, Cristo Jesús, para ser sanado, no importa lo que haga. 

 El corazón del hombre está a tal punto mal que requiere ser recreado, David decía

“Crea en mí, oh Dios,  un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí.” (Sal.51:10).

Hoy, bajo la gracia de Dios esto  puede ser hecho en forma mucho más efectiva aún. 

 Así es, sólo Dios, puede cambiar esta triste realidad del ser humano, por ello mientras el hombre más se  aleje de Dios, más agravará su situación, y más dañará a su prójimo.

 Hoy concluye un año más y con ello, concluye un año de oportunidades para arreglar cuentas con el  Señor que sigue diciendo hoy, como lo dijera ayer a su pueblo rebelde:

“Venid luego, dice Jehová, y estemos  a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.” Notemos que luego agrega: “Si quisiereis y oyereis,  comeréis el bien de la tierra; si no quisiereis y fuereis rebeldes, seréis consumidos a espada; porque la  boca de Jehová lo ha dicho.” (Is. 1:18-20). 

 Este mundo no se arreglará ni con el mejor de los programas políticos, ni con el mejor líder que se pueda encontrar, pues el problema fundamental no se encuentra en un programa, ni en los líderes humanos, se encuentra en el hombre mismo, en su corazón y en el acceso que Satanás tiene a él. Mientras más se distancie el hombre de su Creador, más se dañará a sí mismo. 

 La gran diferencia, entre un hijo de Dios y una persona inconversa, para enfrentar el nuevo año, es que un hijo de Dios que camina en obediencia sabe lo que está sucediendo y hacia donde se encamina este  mundo. Además, tiene a su favor el brazo fuerte de su Padre, quien mora y resplandece en su corazón: 

“Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.” (2ª Co. 4:6). 

 Lo dicho por Pablo, inspirado por el Espíritu Santo es maravilloso, Dios resplandece en nuestros corazones iluminándonos y dándonos un conocimiento nuevo en Cristo. Hermanos amados, acostumbrémonos a observarlo todo desde esta nueva y sublime perspectiva que nos da Dios, exclusiva de  aquellos que han nacido otra vez conformándose en nuevas criaturas. 

 “Y el mismo Jesucristo Señor nuestro, y Dios nuestro Padre, el cual nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia, conforte vuestros corazones, y os confirme en toda buena palabra y obra” (2ª Tes.2:16, 17). 

 Sergio O.M. 

Oración 

Adoración, Alabanza y Gratitud:  

Demos gracias por toda la misericordia divina recibida durante el año que pasó. 

 ¿Cuánto de todo el bien que recibimos durante el año 2020 merecíamos? Consideremos: la diaria salida del sol;  el aire que respiramos; la paz que gozamos; el alimento en nuestra mesa; la salud física; la protección; el amor de  una, o muchas personas; el privilegio de orar; un Dios que nos ama inmensamente; etc. Basta meditarlo, brevemente, para darnos cuenta de que, en realidad, nada merecíamos; todo fue por amor, todo fue por  misericordia, TODO FUE POR GRACIA

Agradezcamos por el estímulo que diariamente recibimos de Dios. 

 Demos gracias, por cuanto, a pesar de las dificultades vividas durante el año que pasó, en Dios y Su Palabra tuvimos una fuente inagotable de aliento y estímulo para continuar con las tareas que nos fueron asignadas en la  tierra. 

Alabemos al Señor por ser el Vencedor de vencedores. 

Jamás olvidemos que todo rival ha sido vencido por nuestro Señor: venció toda tentación; venció las pruebas de la Cruz; venció a la muerte, venció a Satanás y vencerá toda oposición a sus planes y triunfo final; él es el “Rey de Reyes y Señor de Señores” 

Otros motivos de adoración, alabanza y gratitud: 

Peticiones:  

Por nuestros hermanos mayores. 

 Las Escrituras presentan a la ancianidad como una etapa de la vida muy respetable y que debe ser honrada. No obstante, la senectud también trae consigo una serie de inconvenientes como ser: la disminución de las fuerzas, la fragilidad y la pérdida de algunas habilidades y funciones. Es una etapa que debe ser apoyada por los más jóvenes y esto implica; llamarles, socorrerles y orar por ellos. 

La Congregación a la cual pertenecemos. 

 Pidamos por dirección y fortaleza para el Cuerpo Directivo; por renovado ánimo para todos los hermanos que participan en los diversos ministerios; por la incorporación de nuevos miembros; y por un despertar de los dones y  talentos que aún no se ponen al servicio del Señor.

Por las visitas casuales. 

 Oremos por aquellas personas que asistían en forma ocasional a nuestras reuniones, que nunca establecieron vínculos con los hermanos y la iglesia, y que luego de comenzada la Pandemia, dejamos de ver. 

Los hermanos que saldrán de vacaciones. 

 Pidamos que el Señor los cuide en sus viajes y en sus momentos de reposo. Que el sosiego dado les permita experimentar una renovación en su vida devocional y en las relaciones familiares. 

Por nuestros hermanos en Croacia. 

 Oremos por el pequeño grupo de hermanos que pertenecen a la República de Croacia, quienes han sufrido un  fuerte sismo con resultado de muertes. El Señor les fortalezca y permita iluminar a sus conciudadanos con la luz  de esperanza en medio de la oscuridad. 

Otras peticiones

Peticiones en las cuales insistir:  

Nuestros parientes que aún no tienen al Señor Jesucristo como Salvador. 

 Concluyamos este año y comencemos el próximo, insistiendo ante el Señor para que los ojos de nuestros: cónyuges, hijos, hermanos, padres, abuelos, tíos, sobrinos y primos, sean abiertos para reconocer su necesidad  de salvación, y a Cristo como el único Salvador. 

Feliz Año Nuevo 

Predicador

Pastor Sergio Oschilewski Malinowski

Fecha

31 de diciembre de 2020

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