Cita Bíblica: Romanos 10:8-17
Introducción.
Considerábamos el domingo pasado, cuanta confusión de índole espiritual hay entre el común de las personas, incluso entre aquellos que se autoproclaman como cristianos. Es triste ver cómo, con cada nueva generación, se diluye, más y más, el vivir del cristiano, el carácter del cristiano.
El domingo pasado, realizamos un breve vuelo sobre diversas formas de pensamiento religioso, para, finalmente, contrastarlas con Cristo y su Palabra, comprobando la razón por la que, Cristo y su doctrina son incomparables.
En el día de hoy, como una segunda parte del mensaje anterior, les invito a complementar algunos tópicos, y responder algunas preguntas que diariamente oímos entre nuestros conocidos, como ¿Qué pasa con la sinceridad, es que no es suficiente para alcanzar la buena voluntad de Dios? o ¿Qué clase de cristianismo es el correcto, pues hay tantas personas que dicen seguir a Cristo, siendo tan diferentes entre sí?
Para comenzar a responder a estas y otras interrogantes, consideremos un principio fundamental que enseña el apóstol Pablo en su carta a los Romanos, el cual implica que la comunión, adoración y culto a Dios, solo son válidos, bajo las condiciones que Dios mismo especifica. Eso significa que él quiere ser seguido, servido y adorado sólo, “conforme a ciencia.” Romanos 10:2b.
I. BUSCANDO A DIOS “CONFORME A CIENCIA”
A) El nombre de Dios conforme a ciencia.
B) Las características de Dios conforme a ciencia.
C) Un culto conforme a ciencia.
II. BUSCANDO A CRISTO “CONFORME A CIENCIA”
A) Conocer a Cristo conforme a ciencia.
B) El judaísmo conforme a ciencia.
C) La salvación conforme a ciencia.
Conclusión.
Pablo estaba triste por cuanto muchos de sus seres queridos amaban a Dios pero, no “conforme a ciencia” y sabía que, para efectos de la salvación, ello equivalía a estar totalmente perdido.
Dios quiere, y así lo expresa su Palabra, “que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad. Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos,” 1ª Timoteo 2:4-6a.
Notemos que dice, que Dios no sólo quiere salvar a todos los hombres, sino que también vengan al “conocimiento de la verdad”, pues sin el conocimiento de la verdad (lo que equivale a decir: conocimiento “conforme a ciencia”) no hay salvación posible.
Como broche precioso para concluír, otra máxima: Solo en la Biblia se encuentra el “conocimiento conforme a ciencia”.